Verano, tiempo de vacaciones. Pero a menudo y de buena gana, nuestros amigos perros se quedan solos en casa, incluso durante varias horas (si no abandonados, como lamentablemente suele ocurrir en este período …). Y una de las razones por las que los propietarios tienen que dejar a sus mascotas en casa es el hecho de que hay muy pocas instalaciones que permitan llevarlas y guardarlas con ellas. Un problema al que estamos tratando de trabajar duro con leyes que van a romper muchas prohibiciones inconcebibles.
Pero, yendo aún más arriba, muchos italianos se ven obligados a dejar a sus perros en casa porque a menudo no se les permite viajar en transporte público. No es un problema menor, teniendo en cuenta que, gracias también a la crisis económica que les impide poder permitirse unas largas vacaciones, muchos pueden disfrutar como máximo de un día de playa cerca de su casa. Entonces, para ahorrar gasolina, se prefiere el transporte público para moverse.
Pero por suerte, incluso en este sentido parece que algo se está moviendo: por ejemplo en Nápoles, donde el tren que conecta el centro de la ciudad con la provincia -más conocido como Circumvesuviana- ha decidido permitir animales a bordo. Eso sí, con unas normas muy concretas que los propietarios deben respetar: siempre se admiten perros de ciegos, mientras que el resto de perros sólo se admiten si son pequeños o en todo caso pequeños y si se transportan en jaulas, cestas u otro contenedor adecuado. Y, por supuesto, no deben molestar a los demás pasajeros …