Preparación de la berenjena a la parmesana
Con este receta el éxito está garantizado, ¡pruébalo!
Alternativamente, también puedes preparar la parmesana napolitana que también es excelente para celíacos (sin harina y no pasa en el huevo).
Primero, prepara una salsa (no muy espesa) con los tomates pelados (batidos), aceite, ajo, hojas de albahaca y sal al gusto.
Lavar, pelar las berenjenas con el pelador de patatas. Hacerlas en rodajas de unos 5 mm y enharinarlas.
Batir los huevos con el queso y un poco de sal. Poner el aceite en una sartén antiadherente y cuando haya alcanzado la temperatura adecuada, sofreír las rodajas de berenjena, después de pasarlas primero por la harina y luego por el huevo.
Fríelos hasta que estén dorados por ambos lados.
Escúrrelos con una espumadera y deja que se absorba el exceso de grasa colocándolos sobre papel absorbente.
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Licúa el queso ahumado o la mozzarella en mezclador y ponerlo en un bol.
Tomar uno bandeja de hornear del horno, poner un poco de salsa en el fondo y empezar a disponer alternando: berenjena, queso, queso ahumado, salsa y unas hojas de albahaca.
La última capa de berenjenas debe cubrirse solo con la salsa y el queso.
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Hornea la parmigiana en horno ya precalentado durante unos 30 minutos o hasta que se haya formado una buena costra.
Retirar la sartén del horno, dejar enfriar unos minutos. Cortar la parmesana en rodajas y servir en el plato con unas hojas de albahaca fresca.
Prepara la Berenjena a la parmesana un poco antes sabe aún mejor, sin mencionar el sabor al día siguiente.
La variante de la receta ligera también es excelente.